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Comentarios de las
Canciones |
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01 La casa por el
tejado |
"Después
de mucho tiempo aprendí que hay cosas que es mejor no aprender". Excelente canción, primer
single, fresca, nueva, diferente. Un tema lleno de colorido, un oasis en
medio de un panorama musical bastante gris, donde los grupos de baja
categoría van capitulando un año sí otro también. Una buena forma de reengancharse al rocanrol moderno
(con guiños a los mejores grupos de los 80/90),
que también podría ser una nueva asignatura en los colegios.
Cuenta con unos buenos coros y también con la colaboración de Lichis (La cabra mecánica), aún menos
inteligible que de costumbre, en la parte
final del tema. El video futurista de este corte no tiene desperdicio. |
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02 Un buen castigo |
Hay que
querer a la gente y ser generoso con los demás sin esperar recibir nada a cambio, sin intereses, aunque
la verdad es que es difícil lograrlo hoy en día. "Nunca pido nada a cambio, eso es algo
que he aprendido". Si te portas mal acabarás
castigado. Una aproximación al blues/rock con
reminiscencias direstraitianas, con un Fito y un Batiz
luciéndose a la guitarra y los teclados característicos de este disco. |
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03 Feo |
Bonita
semibalada adornada con el saxo de Javier Alzola y
la guitarra del mismo Fito. Habla de
la gente que siempre ve la paja en el ojo ajeno, ¡pa variar!. Para estar bien con los
demás hay que estar bien con uno mismo. "Sé que soy mucho
más guapo cuando no me siento feo". |
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04 El ojo que me
mira |
Notable tema encorsetado
por unas excelentes guitarras y una
batería con gran oficio, que a
más de uno le traerá recuerdos de uno de esos monstruosos grupos como el que
fue The Police (Y yo, y yo, y yo...).
"Veo el ojo que me mira, no sé que esperáis de mí", "Soy todo lo
que me pasa". Y es que cada uno es como es a pesar de los que nos intentan controlar.
Hay que hacer frente a la realidad, siempre es mejor morir con nuestras ideas que vivir con las de los demás. |
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05 Soldadito marinero |
La banda
recupera los tiempos lentos y unos punteos superlativos que resbalan por los
dedos de Fito hacia su guitarra. Una balada marinera que repasa
la vida de un anciano imaginario, una vida que va
languideciendo llena de tristeza
y fracaso, donde las ilusiones se confunden con sentimientos y hasta los amores
lo son si hay un buen peculio de por medio;
una vida reducida a la penuria que acabará fondeada cual bajel camino de su
desguace en cualquier puerto perdido. Aunque hoy por hoy ese tipo de amor se puede encontrar lo mismo en un pueblecito marinero
que en el área metropolitana de una gran ciudad. "Soldadito marinero
conociste a una sirena, de esas que dicen te quiero si ven la cartera llena". |
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06 Corazón oxidado |
Unos
toques de jazz y un ritmo lento maquillan el inicio de este tema así como una
fuerte sección de vientos. El amor hay que alimentarlo día a día para que
siga vivo, si lo descuidas, con el paso del tiempo puede resultar estéril y acabar por desaparecer.
Hasta los castillos más altos terminan por derrumbarse.
Vigila tu corazón, que
aunque sea tan duro como el hierro puede acabar oxidado. Bonita canción que
empieza lenta y va cogiendo ritmo a medida que avanza. Las guitarras me recuerdan alguna canción
de Sabina cuando estaba con Viceversa. "Mi pobre corazón que no le caben ya
las penas, siempre que me duele me lo llevo de verbena". |
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07 Quiero ser una
estrella |
"¡Loco, te la debía!".
Excelente composición de Fito y Fitipaldis para una versión homenaje a Los Rebeldes
que por razones desconocidas no llegó a la estación de término, pero el
resultado tangible del trabajo bien hecho lo tenemos aquí. Sube a este
tren que arranca por todo lo alto a lo
Jerry Lee Lewis. Fito, Rebeldes, Loquillo... ¡El
rocanrol está vivo! Si os gustan Los Rebeldes os encantará esta
canción que seguramente habrás escuchado infinidad de veces.
Si tienes dinero tendrás amigos y muchas novias pero si no lo tienes...
"Quiero ser una estrella, la más brillante de hoy". |
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08 Nada que decir |
Un swing
sobre el que No tengo nada que decir. Saca tu propia
conclusión escuchando este tema que en directo y tras 10 minutos largos
sirve para el lucimiento de todos los componentes de la banda (Batiz,
Roberto Caballero, Javier Alzola, Chema Pérez y el mismo Fito). |
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09 Vamonó |
Instrumental,
a ritmo de rumba con aires brasileños,
con la colaboración improvisada al bajo de Lichis, adornado con saxo e instrumentos de
cuerda, sólo para bailar. |
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10 Las nubes de tu
pelo |
A veces la
experiencia de
estar solo puede resultar una buena terapia. Una
canción melodiosa y nostálgica a la que Fito pone su sello personal. Excelente ejemplo de lo que se puede
lograr haciendo brotar unas notas y unos versos tan
sólo con una guitarra y cantando a capela,
¡es talento puro!.
"Hoy me quedo en casa, lo de fuera no me interesa, ya saldré a dar una
vuelta otro día que no llueva". |
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11 Whisky barato |
Fantástico rocanrol,
con mucho ritmo, acompañado del acordeón de Joseba Tapia.
Otra vez el desengaño y el alcohol son la base del
desaliento y la inspiración que hace germinar esta canción.
"Cuando ya no sirven las palabras, cuando se ha rajado la ilusión, me emborracho con whisky barato. Ya no
queda nada entre tú y yo". ¿Y entonces qué queda al final? Al final
sólo nos queda esta canción. ¡De puta madre! |
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12 Siempre estoy
soñando |
Con un
toque de cantautor y el "savoir faire" de la banda se nos presenta este
corte, que da pie al título del disco. "Mientras me aguanten los
huesos yo quiero seguir cantando, quiero estar cerca de ti, lo más lejos...
a tu lado". Sería un desdoro que Fito no dejase volar su imaginación al
componer estas canciones, con las que es premonitorio un porvenir decoroso.
¿Será el nuevo Apóstol del rocanrol?. ¡Fito, no pares de soñar!. |
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